domingo, 24 de octubre de 2010

Crónica II. Bilbao Night Marathon


Bueno, después de mucha espera llegó la gran noche. Las horas previas estaba igual o más nervioso que el año pasado pero estaba más confiado porque ya tenía la experiencia de correr maratones, y además me conocía bien el circuito.

Llegué con el coche al parking subterráneo que hay junto al Guggenheim (donde estaba situada la salida) a las 20:00. Me cambié en el coche de ropa y ya noté el primer fallo, se me había olvidado la crema pre competición, un día en el que lo necesitaba mucho por el problema que he ido arrastrando con los gemelos. Pero bueno como no podía hacer nada, terminé de organizar todo y salí a calentar.

Dejé la mochila en el guardarropa, corrí un poco para calentar, estiré y como ya no faltaba mucho me situé en mi línea de salida, ingenuo de mí me coloqué en la zona Sub3h. Al igual que el año pasado, la carrera empezó 10 minutos más tarde de las 21:00, pero bueno con la mezcla de la música y del ambiente, no se hizo aburrido.

Finalmente se dio la salida y salimos todos acompañados por los fuegos artificiales. A pesar de haberme colocado en la zona de Sub3h tuve que pelear el primer kilómetro por conseguir un espacio donde correr a mi ritmo, no sé si es que la gente no veía las zonas por tiempo señalizadas o se pusieron en esa zona también la gente que iba a correr el medio maratón.

Los primeros kilómetros estuvieron bien. Era por el centro de Bilbao la mayor parte y la cantidad de gente a los dos lados de la carretera hizo que corriera impulsado por sus ánimos.

Desde el kilómetro 6 al 9 me preocupé un poco porque se me empezó a cargar el tobillo porque no circulaba la sangre al pie, y como ya me había pasado, tenía miedo de que tuviera que pararme a darme un masaje, y no estaba yo como para perder tiempo. Pero por suerte, hacia el km9 ya dejé de notarlo.

El ambiente la primera vuelta fue increíble. Todo Bilbao estaba lleno de gente a los lados animando, solo el camino entre la rotonda junto al puente euskalduna y Elorrieta era zona prácticamente libre de gente pero también venía bien tener una zona donde ir solo para poder hacer cosas que da un poco más de vergüenza hacer delante de todo el mundo, como sonarte los mocos o ir a echar un pis a un lado de la cera.

La segunda vuelta ya se notó que empezaba a escasear gente pero siempre había quien te estuviera animando. Pero lo de la primera vuelta yo no lo había vivido en ninguna de las otras carreras. Zonas como la que pasaba hasta el puente de Abando desde el Guggenheim yendo junto al río me impresionó particularmente, porque era una zona en la que la carretera se estrechaba y la gente te soplaba en la nuca y había una cantidad de gente aplaudiendo y animando casi personalizadamente, porque no daba espacio a ir en grupo, que me recordaba a las imágenes del tour cuando suben un puerto y la gente se va apartando justo cuando el ciclista prácticamente les va a tocar con la rueda.

Los 21 primer kilómetros fueron bastante bien. Sin dolores, sin cansancios, no iba a un ritmo muy fuerte pero iba a gusto, que es lo que quería. Pero noté algo a lo que no le di importancia y que marcaría mi tiempo en el maratón.

El paso por el km 21 fue en 1h:32. Ahí vi que iba a estar muy difícil bajar de las 3h porque tenía que hacer los segundos 21 kilómetros en un poco menos de lo que había tardado para los primeros, y yo sabía que era prácticamente imposible, porque a partir del 30 tenía previsto tener que bajar de ritmo un poco inconscientemente arrastrado por los dolores. Muy bien me tenía que encontrar físicamente para ponerme a subir el ritmo a falta de 4 kilómetros para cumplir el tiempo, pero de todos modos sabía que si llegaba en 3h-3h:05 eso en Donosti se convertiría en sub3h porque es un circuito mucho más rápido.

Pero llegando al kilómetro 23 ya empecé a notar dolor en las rodillas, y ahí supe que ya me podía olvidar definitivamente del sub3h y que tendría que darlo todo para no alejarme mucho de las 3 horas. En la segunda pasada por Moyua oí mi nombre, ya lo había oído mucho durante la carrera porque lo llevaba escrito en el dorsal pero como lo escuché con más fuerza me fijé y vi quera IronLizgor, David Diaz Gil dándome ánimos y la verdad es que fue un chute de adrenalina, desde aquí te doy las gracias David por tu ayuda.

Los siguientes kilómetros, lo que antes había notado y no le había dado importancia empecé a notarlo con intensidad. Me estaban dando retortijones en la tripa, no sé si es que cogí un frío o qué fue, pero me costaba mucho mantener el ritmo porque cada paso iba botándome el estómago y sentía un dolor muy intenso, además el dolor de las rodillas no ayudaba. Lo que me sorprendió es que los gemelos ni los notaba, cuando incluso en el último entrenamiento que hice dos días antes para hacer 10km sentí el gemelo izquierdo un poco.

En el kilómetro 31-32 ya llegó el desastre. No aguanté más y tuve que irme a uno de los baños químicos colocados en uno de los puestos de avituallamiento porque tenía diarrea. Sumando todo, estuve unos 15minutos fuera de carrera y en algún momento pensé en retirarme porque me encontraba muy mal y en consecuencia mi optimismo era muy bajo. Pero como solo me quedaban 10km decidí que saldría y aunque hiciera falta llegaría a rastras.

Así que me puse otra vez en marcha después de avituallar, que a diferencia del año pasado este año estuvo muy correcto, y me dirigí hacia la meta. Fueron unos kilómetros muy duros porque al haber estado parado y sentado, les pasó mayor factura a las rodillas y sentía como si las fuera rompiendo mientras corría. Por suerte los últimos 4-5 kilómetros volvía a haber gente animando y yo creo que en parte fue lo que más me ayudo a no pararme y terminar andando.

Finalmente 3 horas y 26 minutos después de empezar, volví a cruzar la meta en el puesto 167 de 2181 participantes y en el 50 de mi categoría. Visto así no está mal, pero no estoy contento por lo que podía haber sido. No pude ni batir el tiempo de mi maratón anterior, quedándome tan solo un minuto por detrás. Yo calculo que de no haber parado y no haber tenido retortijones hubiera tardado entre 3h:05 y 3h:10 quedando el 55 si hubiera hecho el primer tiempo.

Pero bueno, contento de terminar, de sumar un maratón más a mi cuenta y de poder tener la oportunidad de aprender de los fallos. Me dieron una medalla por terminar que me dio hasta vergüenza recoger. No pude dedicar la llegada a la cámara porque pensaba que estaba donde el año pasado y según llegaba vi que estaba a un lado y no me dio tiempo a reaccionar y según llegué a meta vi que había otra y entre el lío y que estaba agotado no pude dedicarlo y me jodió un poco.

Me dieron la bolsa con la comida, y el bocata mixto que había dentro lo devoré y me quedé con tanto hambre que me compré otro en un puesto que había y una Coca Cola. Que esa es otra, ayer terminé asqueado del Powerade. Powerade por todos lados, y en meta otras dos botellas de Powerade. Que les costaba dar otras cosas como Acuarius o Coca Cola al llegar a meta, si al fin y al cabo todo es de la misma marca.

En fin, como me dolía la tripa y tenía que volver a vaciar, me fui a casa en cuanto pude con un mal sabor de boca esquivando los cortes de tráfico que hacían para la gente que quedaba en carrera. Y por cierto, otro gran fallo, a la hora de ponerme el chip, me lo puse mal de modo que me iba golpeando ligeramente en el dedo centro del pie derecho y he terminado con el calcetín ensangrentado por una herida que se me ha hecho en el dedo. Y tengo que comprarme zapatillas nuevas ya que estas me dieron molestias en la planta del pie durante la carrera, y no quiero que sea un hándicap el hecho de que unas zapatillas me vayan haciendo ampollas en carrera.

Así que bueno, otra vez será, habrá que mejorar, porque a pesar de lo de la tripa, no iba a llegar antes de las 3 horas. Me di cuenta de que es muy complicado andar en esos tiempos, es un ritmo que yo todavía no puedo llevar durante 42km, así que en cuanto me recupere me pondré a entrenar para ir bajando tiempos.

Siguiente carrera, la Behobia-San Sebastián de dentro de tres semanas que según como me encuentre, la usaré de entrenamiento para el maratón de Donosti de dos semanas después.

Eskerrik Asko a todos por el apoyo, en especial a aquellos que me animaron desde la banda, que aunque yo solo reconocí a un par de personas ya me han dicho algunos más que estuvieron por allí animándome, así que muchas gracias a todos, siento el resultado y nos vemos en la siguiente.

¡Hasta la próxima!

1 comentario:

  1. Ers un crack!!! Con la edad que tienes tienes un futuro de escándalo por delante!!!

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